Los Grammy se podrían considerar los más odiados por los artistas, pero una vez más premiaron a aquellos que más han dado que hablar en el úlitmo año en la gala número 56.
En este caso han sido Daft Punk y Macklemore & Ryan Lewis, como no podía haber sido de otra forma. Los franceses fueron los reyes del verano gracias al hit “Get Lucky” junto a Pharrell Williams, poco antes que ellos el dúo ganador formado por Macklemore y Ryan ya estaban haciendo estragos.
Comenzando un repaso general por Daft Punk, vestidos de blanco impoluto (cascos incluidos) recogieron los premios a Grabación del año, Álbum del año, Mejor actuación pop dual/grupal, Mejor álbum de dance/electrónica y Mejor ingeniería de álbum no clásico. Todo a lo que estaban nominados.
Por su parte Macklemore & Ryan Lewis volvieron a casa siendo Mejor artista nuevo, Mejor actuación rap, Mejor canción de rap y Mejor álbum de rap. También estaban nominados al álbum y la canción del año, estatuilla que se llevó Lorde. Doblete para ella con Mejor acutación pop.
En torno a la música rock, otro de los estilos que más expectación genera, Imagine Dragons se llevaron la Mejor actuación rock, Paul McCartney la Mejor canción rock, Black Sabbath mejor actuación metal y Led Zeppelín Mejor álbum de rock. Destacaremos esta última categoría ya que las nominaciones podrían haber sido de otra época viendo a Black Sabbath, David Bowie y Neil Young entre los nominados.
Más artistas que se alzaron victoriosos: Bruno Mars como Mejor álbum de pop vocal, Michael Bublé como Mejor álbum de pop vocal tradicional, Vampire Weekend como Mejor álbum de música alternativa, Rihanna como Mejor álbum urbano contemporáneo, Alicia Keys como Mejor álbum de R&B, Kacey Musgraves como Mejor álbum country, Laura Sullivan como Mejor álbum new age, Emmylou Harris como Mejor álbum de americana, Ben Harper como Mejor álbum de blues, Guy Clarke como Mejor álbum folk, Justin Timerlake con Jay-Z como Mejor videoclip y Mejor colaboración rap y Pharrell William como Productor no clásico del año.
Y los grandes decepcionados de la gala fueron este año Robin Thicke, Taylor Swift y Kendrick Lamar. Por veces pinchadas un tema, este año Robin tenía tantas posibilidades de llevarse un premio como los dos protagonistas. Por su parte Taylor Swift, habitual de no bajarse del escenario cuando está nominada, no se levantó ni una sola vez de su butaca de las cuatro posibilidades que tuvo. El rapero Kendrick Lamar, con su debut “Good Kid, M.A.A.D. City” redondo, partía con más nominaciones que nadie, pero también se volvió de vacío.